Desarrollar estrategias de publicidad es imprescindible para conseguir que tu marca siga creciendo y no se estanque. Gracias a los medios digitales, ahora es más fácil que nunca dar a conocer tus productos y aumentar tus ventas. Sin embargo, la competencia también es mayor que nunca, por lo que necesitas distinguirte de alguna manera.
La clave está en optimizar y mejorar tus estrategias publicitarias constantemente, y por supuesto, necesitas creatividad para ser original o diferente. La publicidad online te permite crear un gran impacto en tu audiencia. Pero no basta con saber utilizar herramientas digitales. Tienes que elaborar un plan de marketing digital en el que la publicidad juegue un papel importante.
Conseguir un gran alcance no es difícil gracias a las redes sociales y otras herramientas como Google ADS. Sin embargo, conseguir que ese alcance se convierta en conversiones y tu negocio se consolide es otra historia completamente diferente. Como ya habrás adivinado, en ese punto es en el que entran las estrategias de publicidad.
La publicidad es una herramienta de marketing que tiene como finalidad la venta de tus productos o servicios mediante la divulgación de mensajes. No solo se trata de dar a conocer lo que vendes, sino de atraer a los consumidores. Esta segunda parte sería la promoción de la marca, que no es lo mismo que la publicidad.
Para posicionar tu marca y tus productos en el mercado digital, necesitas implementar diferentes acciones en distintos canales de comunicación. En este artículo te vamos a enseñar los 4 principales planes que puedes desarrollar con independencia del sector al que te dediques.
Estrategias de publicidad para crecer: La Publicidad de Contenidos
La publicidad de contenidos es una de las estrategias de publicidad más importantes y utilizadas por los profesionales del sector. Esta publicidad influye sobre los consumidores con mensajes directos y claros. Su objetivo es llegar al mayor número de personas posible. Sus acciones son similares al marketing de contenido, pero más agresivo, ya que menciona la marca como solución.
La publicidad de contenidos no suele ser muy específica, puesto que su mensaje suele ser general para alcanzar a todos los usuarios, obviando hasta cierto punto el buyer persona. A continuación, os contamos las tres estrategias de publicidad de contenidos más utilizadas:
- Publicidad de contenidos: muestra tu marca y los beneficios que brindan tus productos a la vida diaria. Es una publicidad descriptiva y se centra en el producto o servicio.
- Publicidad comparativa: esta publicidad es más agresiva y compara tu marca con la competencia. La intención es reforzar las características que diferencia tu producto de otros. No se trata de atacar a otras marcas, sino de expresar que tus productos son mejores. Mucho cuidado, porque si no cumples con lo que prometes puedes sufrir una grave crisis de reputación. Ten en cuenta que puedes generar respuestas de otras empresas.
- Publicidad emotiva: Nada tan efectivo como el contenido emotivo para conectar y crear un vínculo con los consumidores. Hacer reír a una persona, ayudarle a tomar conciencia de algo, recordarle que tu marca aporta felicidad o apelar a situaciones de responsabilidad social. El poder de las emociones es mayor que cualquier otra estrategia que se te pueda pasar por la cabeza. Sin embargo, no es tan fácil como parece. Muchas marcas han abusado de este recurso y los usuarios están bastante inmunizados.
2 Estrategias de publicidad para generar interés: Push vs Pull
Cabe destacar que estas 2 estrategias de publicidad por las que vamos a empezar son para empresas que ya están consolidadas. Cuando tu marca aún no es reconocible por los usuarios, tienes que apostar por otras acciones de crecimiento. Muchas personas cometen el error de pensar que lo único es vender, y olvidan el posicionamiento de marca.
La estrategia pull consiste en generar interés en los consumidores. Pero no se basa en dar a conocer el producto, sino que busca la interacción con aquellos usuarios que están interesados en la marca y buscan información de la misma. Por eso es imprescindible estar bien posicionado y tener fuerza en el mercado.
La finalidad de esta estrategia es permanecer en la mente del consumidor. Para ello, debes utilizar todos los medios digitales disponibles. No creas que necesitas ser una gran multinacional para la publicidad pull. Basta con que te dirijas a tu audiencia, pero claro está, necesitas tener dicha audiencia.
Un ejemplo es la campaña de Coca Cola de 2014, en la que la marca ofrecía refrescos personalizados con tu nombre. Esta publicidad iba destinada a personas que ya consumían coca cola.
Por otro lado, la publicidad push se emplea para introducir nuevos productos al mercado, para lo que necesita darse a conocer. Todas las empresas usan esta estrategia en algún momento (o más bien en varios). Normalmente, se llevan a cabo estrategias de precio para dar a conocer estos productos y atraer clientes.
Estas acciones las llevan a cabo tanto marcas nuevas como consolidadas. Ejemplos son descuentos, suscripciones, tarjetas de fidelización, etc. La estrategia push suele ir de la mano del marketing de contenidos. El blog es una herramienta idónea por la que puedas comenzar para transmitir la imagen de ser un experto en tu sector.
Acciones publicitarias según el tipo de consumidor al que te dirijas
Las estrategias de publicidad basadas en el tipo de consumidores deberías tenerlas siempre presente. El público al que te diriges varía totalmente el lenguaje que debes utilizar y los medios para llegar al consumidor. No nos estamos refiriendo a los tipos de público, que es algo totalmente diferente. Nos referimos, por ejemplo, a dirigirte a empresas o consumidores particulares.
Recuerda que una vez determines el tipo de consumidor, tienes que realizar un profundo análisis sobre sus características. Solo con identificarlo no basta para saber cómo venderle. Vamos a distinguir 3 tipos de publicidad según el tipo de consumidor:
- B2B (Business to business): en este caso, tu empresa va a venderle a otra empresa, es decir, que los consumidores son otras marcas. No importa si son el consumidor final o si son un intermediario y tú el proveedor. Tu cliente es la empresa. Debes elaborar un mensaje directo y basado en los beneficios por encima de todo, ya que las empresas buscan optimizar sus procesos y mejorar su productividad. Recuerda que a las empresas no les gusta perder el tiempo.
- B2C (Business to consumer): esta es la publicidad a la que estamos todos acostumbrados como consumidores. En este caso, tienes que dirigir tus mensajes a una audiencia bien definida y concreta, no como en el caso anterior, cuyo espectro es mayor. Podríamos decir que es una publicidad más convencional.
- C2C (consumer tu consumer): ¿publicidad de consumidor a consumidor? Sí, no nos hemos vuelto locos. Tus clientes son los mejores embajadores de marca que podrías tener. Tradicionalmente, este tipo de publicidad se daba con el boca a boca. Sin embargo, ahora se desarrollan estrategias como los vídeos de testimonios o el contenido viralizable. No tienes que esperar a que te recomienden. Puedes motivarlo.
Basa tus estrategias de publicidad en crecer no solo en la venta
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